En 1926 se trasladará con su madre y sus hermanos a Concepción, donde comenzará a estudiar en un estricto internado en el que descubrirá la literatura, y en el que permanecerá varios años, siempre becado.
En 1934 decide abandonar esta institución y viajará a Iquique (en el norte del país). Allí se reincorporará a sus estudios de secundaria y colaborará en el diario "El Tarapacá". Se relacionará también con los mineros del salitre.
En marzo de 1936 regresará a Concepción, por barco. Se inscribirá en el último curso de Humanidades, ahora en el Liceo de Hombres, y fundará la revista "Letras", en donde publica su ensayo "Los treinta años de Pablo Neruda" centrado en sus mecanismos expresivos.
En 1937 comenzará a estudiar Derecho en la Universidad de Santiago de Chile. De 1938 a 1941 trabajará como Inspector en el Internado Barros Arana para costearse sus estudios universitarios. Posteriormente, se inscribe oficialmente en el Pedagógico, cuando cursa el segundo año de Derecho. En esta época pasará a formar parte del grupo surrealista Mandrágora, fundado por Braulio Arenas, Teófilo Cid y Enrique Gómez Correa.
En 1942 abandonará Santiago. Después, conocerá a María, una joven de 18 años, hija de un ciudadano británico recién casada y a punto de separarse. Ella llegará a ser su esposa y madre de su hijo mayor, y la figura central en muchos de sus poemas de amo. Con ella se fugará al desierto de Atacama; allí, entre otras actividades, se dedicará a la de alfabetizar a los mineros.
En 1944 regresará a la capital del país para trabajar en la Dirección de Informaciones y Cultura. Trabajará también con Leopoldo Castedo en la revista "Antártica", de la que llega a ser Jefe de Redacción, y retornará sus estudios de Pedagogía.
Al año siguiente se irá a Valparaíso donde impartirá clases en el Colegio Alemán. Presenta, además, el manuscrito de "La miseria del hombre" a un concurso de la Sociedad de Escritores de Chile, bajo el seudónimo de "Heráclito". El premio ofrecido será la publicación del libro.
Un año después seguirá trabajando en Valparaíso: de día enseña en colegios de jóvenes y en las noches en liceos nocturnos, cuyos alumnos son empleados, obreros, gente mayor. Comenzará a tener conversaciones con autoridades del puerto para crear un Instituto de Enseñanza Superior: de allí saldrá lo que llegaría a ser la Universidad de Chile de Valparaíso. Como no le han publicado su libro premiado, decide costear él su edición.
En 1952, con las recomendaciones de los profesores del Pedagógico de Santiago Antonio Doddis y Juan Uribe Echeverría, gana por concurso las cátedras de Literatura Chilena y de Teoría Literaria del Departamento de Español de la Universidad de Concepción, departamento que debe reorganizar y comienza a dirigir.
En 1955 dirigirá la Primera Escuela de Veranode la Universidad de Concepción y, a partir de 1958, organizará también los famosos Congresos de Escritores en Concepción, reuniendo lo más selecto de la literatura latinoamericana. Ese mismo año obtendrá por concurso la Beca de UNESCO para escritores. En septiembre, haciendo uso de ella, se embarca en Buenos Aires rumbo a Le Havre. Lo acompaña Rodrigo Tomás. Se instala en París y recorrerá muchas de las capitales europeas.
En 1969, como resultado del proceso de reforma universitaria del año anterior, en el que jugó papel muy significativo, será elegido Director del Consejo de Difusión Universitaria de la Universidad de Concepción. Se convierte así en la tercera autoridad y estará a cargo de toda la política cultural de la institución.
Al año siguiente, Allende lo nombra Consejero Cultural en China donde vivirá la etapa anterior a la Revolución Cultural, lo que le da un conocimiento singularísimo y directo del proceso. En 1972 se traslada a Cuba como Encargado de Negocios, rango equivalente a Embajador que ocupará hasta la caída del Presidente.
Ante este hecho y convertido en un exiliado forzoso, intentará sin éxito que le acojan en varias misiones diplomáticas de América y Europa. Finalmente, se irá a Alemania Oriental, donde se le asignará una cátedra en la Universidad de Rostock, con el título de ''Herr Professor" y un salario alto, pero sin clases.
En 1978, gracias a una triquiñuelas con pasaportes antiguos, puede salir de la RDA. Se trasladará con Hilda, su mujer, y su hijo Gonzalo, a Caracas, contratado por la Universidad Simón Bolívar. Formará parte del jurado que otorga el Premio "Rómulo Gallegos".
En 1979 obtiene la beca Guggenheim y regresa Chile, en donde no se le abren las puertas de ninguna universidad, por lo que se instala en las tierras de Chillán, cerca de su Lebu natal. Aceptará varios contratos temporales en universidades americanas hasta que, en 1985, comienza a trabajar en la Universidad de Brigham Young, de Provo, Utah, de la que será nombrado Profesor Emérito y Escritor en Residencia.
En enero de 1991 será designado profesor emérito de la Universidad de Concepción y se instala definitivamente en Chile, aunque sigue dando conferencias y seminarios por todo el mundo. Será a partir de esta época cuando le llegarán la mayoría de reconocimientos y premios.
Así, obtiene en 1992 el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana y el Premio Nacional de Literatura de Chile; en 1995 el título de Ciudadano Ilustre de Valparaíso; en 1997 el Premio José Hernández; y en 1998 el Premio Octavio Paz Poesía y Ensayo. Por último, en 2003, obtendrá el Premio Cervantes de Literatura.
Tras varios meses de agonía al sufrir un accidente cerebrovascular, Gonzalo Rojas murió el 25 de abril de 2011 en Santiago de Chile a los 93 años de edad.
Obra
- La miseria del hombre (1948) |